Omni3D Filament Flow Control™
Mucha gente piensa que la impresión en 3D es un asunto muy sencillo... y en parte tienen razón, porque el simple hecho de extruir el material y aplicarlo capa a capa no es un proceso exigente. La dificultad comienza cuando se quiere imprimir geometrías complejas y con diversos materiales. En esta situación, no basta con un simple cabezal que caliente el filamento a una determinada temperatura y aplique el material a lo largo de un recorrido determinado.
Esta necesidad ha impulsado cambios en la impresión 3D, cambios que han sido iniciados por las impresoras 3D industriales y los filamentos de impresión industriales. Pero, ¿por qué hablamos de impresoras 3D „industriales”?
Por al menos dos razones. La primera es que la industria en sentido amplio y todo tipo de líneas de producción son usuarios de este tipo de impresoras. La segunda razón es que en las imprentas industriales utilizamos una serie de sistemas que nos permiten trabajar a un nivel de exigencia diferente. Estos sistemas pueden compararse con los instalados en los coches, que también pretenden darnos seguridad y una experiencia de mayor calidad. Uno de estos sistemas es el control de flujo de filamento Omni3D. Como su nombre lo indica, se trata de un sistema que permite controlar el flujo de filamento.
¿Por qué es tan importante y qué hace? Este sistema garantiza la precisión dimensional y la repetibilidad. Mediante codificadores especiales, el sistema cuenta la cantidad de filamento introducido y la compara con la cantidad indicada en el gcode. Si las desviaciones son demasiadas grandes, la impresora informa al operador.
Otra ventaja de este sistema es que la impresora, a diferencia de las de sobremesa, no se limita a saber si el filamento está o no. Sabe exactamente la cantidad de material que ha extrudido, y con esta información podemos planificar cuándo, por ejemplo, sustituir la bobina por una nueva para las impresiones de gran volumen.
En resumen, una impresora 3D industrial es un sistema de vasos comunicantes que trabajan juntos para imprimir un modelo determinado, como un equipo en cualquier deporte de equipo. Uno de estos sistemas es el Omni3D Filament Flow Control, que garantiza la calidad, pero también por la gestión del presupuesto y del tiempo, ya que es capaz de detectar la escasez de filamento, los atascos y todos los sucesos indeseables que pueden ocurrir durante la impresión. Todos estos sucesos aleatorios que pueden ocurrir hacen que nuestras impresiones acaben en la papelera y sólo estamos perdiendo tiempo y dinero. Por ello, los sistemas que sucesivamente implanta Omni3D están dedicados a empresas que apuestan por la calidad, la fiabilidad y la seguridad.